Cuando estás con gripe o resfriado, lo que más necesitas es descanso. Dormir bien es clave para recuperarte más rápido, pero a veces, los propios síntomas —como la congestión, la tos o la fiebre—, y los medicamentos que tomamos para aliviarlos, pueden jugar en contra de un buen descanso. ¿Alguna vez has notado que después de tomar un antigripal te cuesta dormir… o, al contrario, te entra un sueño tremendo? No estás solo. En este artículo te explicamos la relación entre los antigripales y sueño, qué debes tener en cuenta al tomarlos y cómo elegir el tratamiento adecuado para sentirte mejor sin alterar tu descanso.

El sueño: un aliado contra el resfriado
Dormir bien es mucho más que un descanso placentero: es una parte esencial del sistema inmunológico. Mientras dormimos, nuestro cuerpo produce citoquinas, unas proteínas que ayudan a combatir infecciones, inflamaciones y el estrés. Por eso, cuando estás enfermo, tu cuerpo te pide más horas de sueño: está trabajando duro para vencer al virus.
El problema es que los síntomas de la gripe y el resfriado —nariz tapada, dolor muscular, fiebre, escalofríos, tos persistente— hacen que dormir se convierta en una tarea difícil. Ahí es donde entran en juego los antigripales: medicamentos que alivian los síntomas para que puedas descansar y recuperarte mejor.
¿Qué son los antigripales y qué llevan?
Los antigripales son medicamentos compuestos por una combinación de principios activos que actúan sobre los distintos síntomas del resfriado o la gripe: fiebre, dolor, congestión, mucosidad, tos… Entre los componentes más comunes de los antigripales están:
- Analgésicos y antipiréticos, como el paracetamol, el ácido acetilsalicílico o el ibuprofeno, que ayudan a bajar la fiebre y reducir los dolores musculares.
- Descongestionantes, como la fenilefrina, que alivian la congestión nasal.
- Antihistamínicos, que pueden ayudar con la secreción nasal o los estornudos, pero también suelen provocar somnolencia.
La combinación de estos ingredientes puede tener efectos distintos sobre el sueño, y aquí es donde hay que prestar atención.
¿Pueden los antigripales darte sueño?
Sí, algunos antigripales pueden provocar somnolencia, sobre todo los que contienen antihistamínicos de primera generación, que actúan sobre el sistema nervioso central. Estos fármacos pueden ser útiles si estás resfriado por la noche y te cuesta conciliar el sueño. Pero si necesitas estar activo durante el día, no son la mejor opción.
Por eso es importante leer bien el prospecto y elegir un antigripal adaptado a tu momento del día.
¿Pueden los antigripales alterar el sueño?
También puede ocurrir lo contrario: que el antigripal te active demasiado. Esto suele suceder con medicamentos que contienen descongestionantes como la fenilefrina o la pseudoefedrina, que pueden producir insomnio, nerviosismo o aceleración del ritmo cardíaco. Aunque estos ingredientes son muy eficaces para liberar la nariz, pueden dificultar el sueño si los tomas cerca de la hora de acostarte.
¿Cuál es el mejor momento para tomar un antigripal?
Depende del tipo de antigripal que estés tomando. Si tienes que tomarlo varias veces al día, intenta que la última dosis no sea demasiado cerca de la hora de dormir si contiene estimulantes. En cambio, si tu antigripal produce somnolencia, evita tomarlo por la mañana si tienes que trabajar o conducir.
Una buena estrategia puede ser combinar distintos productos según tus necesidades durante el día y la noche. Por ejemplo:
- Por el día, puedes optar por un antigripal que te ayude a estar activo sin sueño.
- Por la noche, puedes tomar uno que te ayude a descansar, si notas que la congestión o los dolores te impiden dormir.
Couldina: diferentes opciones para cada momento del día
En Couldina entendemos que cada persona y cada resfriado son distintos, y por eso ofrecemos distintas fórmulas adaptadas a tus necesidades. Todos nuestros productos están diseñados para aliviar los síntomas del resfriado y la gripe, y ayudarte a sentirte mejor lo antes posible, sin descuidar el descanso.
Couldina con ácido acetilsalicílico
Contiene ácido acetilsalicílico (un eficaz antipirético y analgésico), fenilefrina (descongestionante) y clorfenamina (antihistamínico). Esta combinación ayuda a aliviar el malestar general, reducir la congestión nasal y mejorar los síntomas alérgicos asociados al resfriado.
¿Puede afectar al sueño?
Sí, ya que la clorfenamina puede provocar somnolencia. Por eso, esta opción puede ser útil si tienes problemas para dormir por culpa de la congestión y el malestar.
Couldina con paracetamol
Esta fórmula combina paracetamol (para el dolor y la fiebre), clorfenamina (antihistamínico) y fenilefrina (descongestionante). Está indicada para quienes prefieren evitar el ácido acetilsalicílico.
¿Puede afectar al sueño?
De nuevo, la presencia de un antihistamínico puede generar somnolencia. Ideal para las noches, o si necesitas descansar bien durante el día.
Couldina con ibuprofeno lisina
Contiene ibuprofeno lisina, un antiinflamatorio potente que alivia el dolor de cabeza, la fiebre y los dolores musculares. Esta fórmula no lleva antihistamínicos ni descongestionantes.
¿Puede afectar al sueño?
En principio, no debería alterarlo ni causar somnolencia, por lo que es una buena opción para usar durante el día si necesitas estar alerta.
Consejos para dormir mejor si estás tomando antigripales
Más allá del medicamento que elijas, hay algunos hábitos que pueden ayudarte a dormir mejor mientras estás enfermo:
- Mantén una rutina de sueño regular, aunque estés en casa. Intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días.
- Evita las pantallas antes de dormir: la luz azul del móvil o la tele puede interferir con tu sueño.
- Ventila bien la habitación y mantén una temperatura agradable, ni muy fría ni muy caliente.
- Hidrátate bien durante el día, pero evita beber mucha agua justo antes de acostarte para no tener que levantarte al baño.
- Haz lavados nasales o usa humidificadores para mejorar la respiración durante la noche.
- Consulta con tu farmacéutico si no estás seguro de qué antigripal se adapta mejor a tus necesidades.
Conclusión: sí, los antigripales pueden influir en tu sueño
Como ves, los antigripales pueden ayudarte mucho a aliviar los síntomas del resfriado o la gripe, pero también pueden afectar al sueño dependiendo de su composición. Algunos te provocarán sueño, otros pueden alterarlo. Lo importante es que elijas bien el producto que mejor se adapta a ti y al momento del día en el que lo tomas.
En Couldina tienes distintas opciones para sentirte mejor sin que tu descanso se vea perjudicado. Tanto si necesitas pasar el día activo como si lo que quieres es dormir bien por la noche, hay una fórmula pensada para ti.
Recuerda: dormir bien es una parte fundamental de la recuperación. Así que elige bien tu antigripal y deja que tu cuerpo haga su trabajo.
¿Tienes dudas sobre qué producto Couldina te conviene más? Consulta con tu farmacéutico de confianza o visita nuestra web para saber más sobre nuestras fórmulas:
¡Tu descanso también es salud!